martes, 5 de abril de 2011

Manolito, el Madrid; la Manita y el Schalke

Pues sí, siete años después el Real Madrid pisaba los cuartos de final de la Copa de Europa. Enfrente el Tottenham, por mi temido de medio campo hacia delante, pero entre lo de Crouch y que no ha habido pugna, el que es del Madrid ha disfrutado. Pero no me puedo resistir, más que los blancos ganen 4-0 en esta fase, la noticia fue lo del Giuseppe Meazza, donde se jugó la otra eliminatoria del día.

El Schalke 04 de Raúl, Jurado y Escudero visitaba el estadio italiano, en concreto, al vigente Campeón de Europa; antes del sorteo, incluso de la fase de grupos, se decía que el equipo alemán era uno de los asequibles (en verdad lo era, o lo es); pero ahí están. Y ahí está él, Raúl, de nuevo, 70 veces, apartando disputas, en Champions.  



El caso es que de una forma o de otra, el equipo humilde de tierra minera sólo ha perdido un partido de la máxima competición del continente, también un empate, el resto son victorias: Increíble. Porque ya está escrito en Cabina Deportiva, el Schalke tiene muy poco. Y con eso, está casi en semifinales ganando 2-5 al Inter de Milán, casi nada.

Volviendo al Bernabéu, el Real Madrid salió muy serio, el ambiente era para ello; por fin el estadio se pareció al de las grandes noches. Con la posesión pero sin manosear el cuero, rápido, incisivo, como debe ser, con autoridad. Dos disparos en tres minutos y antes del cuarto de hora, Crouch dejaba a los suyos con diez; creo que justas las tarjetas, se puede discutir, pero si Van Persie se fue a la calle en el Camp Nou…

Y dominaba sin que Xabi Alonso y Özil aparecieran demasiado, algo a destacar también, y con Cristiano Ronaldo casi a la mitad de lo que él puede dar de sí. Adebayor hizo el trabajo por todos, dos goles y partido cerrado. Luego el golazo de Di María y el zarpazo final de Cristiano para cerrar el marcador y prácticamente la eliminatoria.



¡Qué noche!, 4-0 del Real Madrid y el Schalke haciéndole una manita al que hace unos mese levantó la Copa. Buen Madrid, grande el Schalke; excelente Manolito y agrandando su leyenda, Raúl, perdón, perdón, pero Siempre Raúl.

P.D.: Raúl fue el que más corrió de los futbolístas que estaban en el campo: 11,127 km.

miércoles, 9 de marzo de 2011

EL SCHALKE ES RAÚL

Pues sí, el Schalke 04 está en los cuartos de la Copa de Europa, que tiene más nombre. Y eliminando a un equipo español, y no a cualquiera, al tercero de la Liga, el primero de los mortales según dicen. Raúl, seis años después, pisa una ronda más en su competición.

Hay equipos que parecen identificarse con sus jugadores, a veces incluso al revés. El Real Madrid parecía hecho a Raúl, y lo era, en cuanto a valores, respeto, caballerosidad, saber estar, raza… aunque luego llegue Mourinho y se lo cargue. Pero se fue al Schalke, y el que escribe se metió en Internet para ver quienes eran y que habían hecho.

Lo sorprendente es que los de Gelserkinchen la temporada pasada estuvieron disputando el titulo en Alemania, es verdad que el equipo ha variado mucho, a peor. Y esta temporada, ya se ha visto, en mitad de tabla en la liga pero sorprendiendo en Copa eliminando al Bayern Munich en semifinales. Y en la Copa de Europa… ¡ay amigo!

En el primer cruce: el Valencia. Por nombre, por juego, por jugadores, por fútbol, en definitiva, favoritos los ché. Y en la ida 1-1, superior el equipo de Emery pero con errores puntuales, pasable. Para la vuelta concentración y convencidos de pasar. En el estadio del Schalke nadie ha ganado en esta competición, tiene algo ese estadio, y no sólo estrellas de comodidad.



Partido sin mucho atractivo, con nervios, pero superioridad del Valencia, que se adelantó pronto. El balón para los de blanco, estaba claro que los alemanes iban a sufrir. Farfán se saca una falta para poner el 1-1 y a soñar; teniendo siempre presente que un gol del Valencia les metía en la siguiente ronda, pero perdonaron demasiado.

2-1 de Gavranovic, los de Emery se quedan algo tocados pero disfrutan de las mejores ocasiones: Aduriz mano a mano con Neuer, Mathieu, Tino Costa… todas falladas. Y en el otro lado, sin tener fuerzas, sin tener calidad para tocar pero segundo balón que estrellan en la meta de Guaita y al final: 3-1 de Farfán.

Mejor el Valencia, pero eliminado. Esto es el fútbol, el Schalke hace historia y se mete en cuartos, con Raúl, con Jurado y con Escudero; dos partidos más de El 7 en Europa. Y ahora se repite la historia, el Schalke es Raúl: no es excelente en nada, no es explosivo, no presume, trabaja, le dan por un rival menor, por acabado, pero avanza una vez más con paso firme.

El Valencia es un equipo español, sí, pero ahora ya está fuera, con permiso de los Albeldas repartidos por España, yo soy del Schalke 04, como Florentino; bueno, yo de verdad.

martes, 1 de marzo de 2011

UN GOL QUE LE COSTÓ LA VIDA

Cuando el colombiano Andrés Escobar entró al estadio Rose Bowl de Los Ángeles, para disputar el segundo partido de su selección en el Mundial del 94, no podía imaginar que un error le costaría la vida diez días después. Colombia llegaba a la cita mundialista con un buen equipo, con estrellas como Valderrama, Freddy Rincón o el “Tren” Valencia, había muchas esperanzas en realizar una buena competición.

Pero el equipo quedó último de grupo y no pasó de la primera fase. Tras perder frente a Rumania, el partido contra Estados Unidos era clave. En el minuto 35, el balón partía desde la izquierda buscando a John Harkes, Escobar se tiró al suelo para interceptarlo, el cuero le golpeó en la pierna derecha y cogió dirección a puerta; el portero Córdoba ya estaba batido y supuso el 1-0 para los anfitriones norteamericanos.

El dorsal 2 de Colombia, no olvidó esa jugada durante el resto del partido. En la segunda parte, llegó el 2-0 y en el minuto 90, el definitivo 2-1 que dejaba a los colombianos fuera del Mundial. Escobar disputó el tercer encuentro contra Suiza, sería la última vez que el de Medellín jugara con la elástica amarilla.


Ya nadie recordaba sus coberturas, lo bien que trataba la pelota, el temple de zaguero, su disparo con la zurda o su gol de cabeza contra Inglaterra en Wembley. En la mente de muchos sólo estaba el gol en propia puerta.

De vuelta a su país, y estando de vacaciones en su ciudad natal, un aficionado le increpó por lo sucedido contra Estados Unidos; el defensa pidió respeto, pero Humberto Muñoz Castro sacó una pistola y le disparó en múltiples ocasiones. Andrés Escobar falleció antes de llegar al hospital, lugar hasta el que se desplazaron varios compañeros de selección, como René Higuita, para reconocer su cadáver.

A “El Caballero”, como apodaban a Escobar, le marcó un fallo en un partido de fútbol, un error le condenó a muerte. Nunca se pudo demostrar, pero detrás del asesinato situaban a las mafias de las apuestas deportivas. Humberto Muñoz fue condenado a 43 años de cárcel, de los que sólo cumplió once.

Más de 120.000 personas acudieron a su funeral, y su figura quedó como la de un héroe para la prensa de su país. Pocos años después de su muerte, se organizó la Copa Andrés Escobar del fútbol callejero y en el octavo aniversario, la ciudad de Medellín levantó un monumento en su memoria.

El fútbol fue el motivo de su vida, jugó en el Atlético Nacional, disputó 50 partidos con Colombia y marcó 21 goles; pero sin duda, se recuerda uno, el que le arrebató la vida.

martes, 22 de febrero de 2011

SÓLO PUEDE JUGAR UNO: ADEBAYOR O BENZEMA

Desde que el Real Madrid fichó a Emmanuel Adebayor, Mourinho tiene varias posibilidades en ataque. Con la lesión de Higuaín, el portugués sólo podía contar con Benzema en el frente ofensivo, y no le bastaba debido a su bajo rendimiento. Pero con el togolés el panorama ha mejorado; no sólo Adebayor aporta algo distinto, si no que el francés ante la competencia hace mejores partidos.

Son dos nueves distintos. Karim es rápido, frío, poco participativo y tiene altibajos de cara a gol. Adebayor es más rápido aún, va bien de cabeza, aguanta el balón a la espera del compañero y fija a las defensas creando espacios. Mourinho ha dicho que son complementarios, pero no han estado juntos sobre el césped más de media hora.



Por eso hay que elegir: el 9 o el 6, Karim o Emmanuel. Benzema vuelve a la que fue su casa, Lyon, donde se hizo futbolísta y hasta donde se fue Florentino Pérez para ficharlo; eso le motiva, algo que le gusta a Mou, además en está Champions ya lleva cuatro goles, en el último partido ante el Auxerre, marcó un hattrick.

Adebayor no ha debutado todavía en la máxima competición continental con el equipo blanco, pero en sus cinco participaciones con el Madrid ha hecho dos goles y su aportación se ha notado en el grupo. El Lyon, tiene a cinco hombres que pasan el 1,85 de altura, y Manolito mide 1,91, tanto para defender como para atacar.

Los dos tienen argumentos como para convencer a su entrenador, son capaces de desquilibrar un partido y el Real Madrid los necesita, porque hace seis años que no supera los octavos de final de Champions y porque el Lyon es el único equipo con el que no ha ganado en las veces que se vieron las caras.

martes, 15 de febrero de 2011

RAÚL: EL 7 DE EUROPA


En verano se fue al Schalke, un equipo con poco nombre en el viejo continente y muchos lo relacionaron con un retiro de la alta competición. Raúl se enfundó el 7 azulón con las ganas de continuar con su carrera, porque demostrar, ya ha lo ha hecho desde los diecisiete años.

Y arrancó mal, se metieron en descenso, hubo palos para el conjunto y sobre todo, para Raúl. Pasaron las jornadas, el Schalke se asentó, se metió en mitad de la tabla, que en verdad es para lo que le da. En Copa está en semifinales y se enfrenta a otro rival clásico en su carrera: el Bayern. Pero hay una competición en la que tenía algo pendiente.

Es la Copa de Europa, o como ahora la denominan, Champions League. Raúl no se quería ir a EE.UU., tampoco, a Emiratos Árabes o algún sitio exótico a llevarse la pasta; tenía un objetivo por delante, que era estar al frente de una clasificación más. Bueno, quizás no es una más, es una acorde con su dimensión futbolística: ser máximo goleador de la mejor competición de clubs.

El sorteo de octavos dictaminó que el Valencia iba a ser el rival, es decir, Raúl volvía a España. Lugar en el que dejó seguidores y también detractores. En la rueda de prensa previa al partido, afirmó que le hubiera gustado no enfrentarse a un equipo español, pero que Mestalla siempre le gustó.

Durante el partido fue pitado, también aplaudido, como en el recibimiento en el aeropuerto, pero él estaba a lo suyo. El Schalke no tiene jugadores como para dominar un choque, y menos frente al equipo de Emery; tenía que aguantar y esperar a que llegara una oportunidad, y la tuvo.

     

Primero Huntelaar, que falló en el disparo, y en la segunda mitad la tuvo él. Jugada que parte de la banda, ve el desmarque hacia la frontal del área pequeña, le gana la posición a Navarro y la engancha con la zurda para hacer el 1-1. Sí, Raúl, siempre Raúl, 70 veces Raúl en Europa. Lo celebró con rabia, como cuando le marcó aquel magnifico tanto a Atlético en el Calderón yéndose se fue de López y se la coló a Molina.

Entonces surgió el cántico fácil, el de Villa Maravilla; al igual que lo hacían con Luís Aragonés en el Manzanares. Tan práctico como el recurso de aludir al Mundial y la Eurocopa, pero Raúl esta ahí, no necesita de la defensa de nadie. Eso sí, si este hombre hubiera nacido en otra capital europea sería considerado uno de los mejores del mundo.

Y se marchó en silencio, aplaudiendo a su gente y con la cabeza bien alta. Es el 7 de Europa y aún tiene camino por delante. Me gusta un comentario que leído tras el partido, de MisterChip en Twister: “Ser de Raúl no tiene nada que ver con ser de un equipo. Ser de Raúl significa ser del fútbol, ser de España, ser de los que nunca se rinden”.

lunes, 31 de enero de 2011

LA FIEBRE BLANCA

Se barruntaba hace semanas que el Real Madrid podía pinchar, vale el empate para ello, en cualquier momento. Y fue en el Reyno de Navarra: lugar de presión, de lucha constante y de grada correosa; pero todo eso ya se sabía. Lo que no estaba tan claro era que todo un Real Madrid, después de la inversión anual para reforzarse dependiera de un sólo hombre para poder jugar al fútbol, que es a lo que se dedican profesionalmente.

En una línea, el Madrid ha perdido la Liga por una fiebre, mejor dicho, porque Xabi Alonso tenía fiebre. Qué simple, pues sí, pero no. Porque me niego a pensar que todo se reduce a eso; a que en una plantilla de 25 futbolistas elegidos entre los mejores no haya nadie capaz de manejar la nave más que el donostiarra.
Pero cuando falta el que mueve el timón, el barco va a la deriva. Al entrenador no se le ocurren más alternativas que sacar a Lass y Khedira, que no ven más allá del casco de soldado que tienen puesto.
Recuerdo darle un palo al Atlético de Madrid por su zona de máquinas, pero aquí la aplico también: el Real Madrid no juega a nada.

Estuvo en el alambre en Mallorca, partido inaugural del campeonato, luego comenzó a ganar hasta que se enfrentó al Levante, otro empate; el vuelo cogió altura hasta llegar a Barcelona (obvio el comentario). Después en Almería sonrojo, y en Pamplona ya han encendido la alarma definitiva.


Triple cambio, como si eso hiciera temblar al rival, que por entonces estaba por delante, con el ambiente perfecto y sin pasar apuros. Xabi Alonso, Kaká y Adebayor, pues muy bien. ¿Por qué Kaká? De los otros dos es evidente, Xabi por coherencia y Adebayor porque no vas a pedir un 9 durante meses y no ponerlo cuando se te va la Liga.

Pero el mensaje al vestuario, o a parte de él, es como para no volver. Qué ha hecho el brasileño para salir antes que yo, preguntaría Granero; qué ha demostrado el de Togo en los últimos dos meses para tener minutos, se preguntaban Pedro León y Canales… cinco hombres de ataque y ningún tiro a puerta.

En fin, que la Liga se ha marchado. A los blancos, les queda seguir ganando porque por estar, está más cerca el 3º que el 1º; y en la Copa, si se pasa a la final, sólo hay un remedio, que es el idulto para salir vivo. De la Copa de Europa no me atrevo ha mencionar nada.

P.D.: Al que le gritaban “vete con ellos” es el mismo que les mantiene en Primera, Camacho.

miércoles, 26 de enero de 2011

EL ANUNCIO NO JUGÓ

Sería fácil empezar con lo del anuncio, de hecho, está en el titular; pero es injusto negar el gran ambiente del Pizjuán. Cuando suena el himno del Centenario, se palpa fútbol, sentimiento, valores… con lo que no hacen falta alicientes para ganarte a tu gente.


Manzano ya ha eliminado dos veces a los blancos de la Copa con el Mallorca y lo intenta ahora con el Sevilla. El equipo no es el que era; quizás sí en cuanto a nombres, pero algo falla en esa fórmula que llevó a los sevillistas a finales. Un centro del campo con Zokora – Romaric no suena muy bien, más si quieres fabricar fútbol; en las alas, Jesús Navas aún no ha vuelto del todo, y Perotti ya no brilla. Kanoute y Luis Fabiano necesitan más surtidores, aunque se valen solos.

En frente, más de lo mismo: Lass – Xabi – Kedhira, soldados para robar y dejársela a los galgos, que a base de tanto exprimirlos, serán pastores alemanes en breve. Un Sevilla – Real Madrid sin refriegas no sería lo mismo, Sergio Sánchez lo supo demasiado pronto.

Y en esas, como suele pasar en el bendito mundo del deporte, ocurrió lo extraño. Karim baja a línea de medios, hace una pared en banda, corre, se desmarca, la vuelve a coger, recorta, respira y la coloca: 0-1. Benzema se abrazó a Mourinho, gracias por todo. Quién les pintó la cara, fue Benzema.

La respuesta estuvo en el 46. Luis Fabiano regatea a Casillas, ya tiene mérito, dispara flojo y Albiol, tremendo el central y no sólo en éste partido, la intenta sacar. Depende de para quien, la pelota entra o no; lo único objetivo es que debe de sobrepasar toda la circunferencia, y creo que no lo hace.



Ponía más la gente desde la grada que el Sevilla en el campo. Con un Madrid muy serio, con todos enchufados, era difícil sorprender. A la contra podían matar el resultado y Özil perdonó de manera exagerada a medio metro de la línea. En esa, Cristiano debería de haberla metido de tacón, no es vanidad, era lo que tenía que hacer, pero se cortó.

Aún rozó el empate Negredo al aprovechar una mala salida de Iker. Cuando Undiano pitó el final, vino la imagen lamentable. Desde la grada lanzan una botella a Casillas que le golpea en la cabeza; los recogepelotas, en vez de atender al portero, se van a guardar el objeto. Del Nido, que se jacta de haber ascendido al autor del video, tiene que responder por ello; él es el responsable directo de esto.



P.D. 1: No quiero imaginar qué hubiera pasado de haber sido al revés. Espero sanción, como en el
Villamarín.

P.D. 2: Si el gol de Benzema, lo hace el 10 del Barcelona... se abren informativos.

P.D. 3: Si Sergio Ramos marca la chilena... Del Nido apaga las luces del estadio.